La Sonrisa interior
Mediante esta meditación nos comunicamos con nuestros órganos, desde lo más profundo de nosotros mismos, eliminados los deseos del Yo, dirigimos una atencion consciente con amor y agradecimiento a los distintos órganos; los taoistas creen que la conciencia está enaraizada no sólo en el cerebro, sino también en los órganos vitales y, en cada una de las células; los sonidos curativos y la sonrisa interior son el punto de partida para escuchar al cuerpo y crear una sensibilidad interior consciente.
Siéntate o túmbate, mantén tu mente en calma y dibuja una sonrisa en tu mente, imperceptible en tu cara, deja que la sonrisa fluya al punto central del entrecejo, después hacia la nariz y las mejillas, siente cómo se relajan los músculos faciales. Sonríele al cuello y siente cómo la energía te abre la garganta, sonríe a la parte delantera del cuello donde están situadas la tiroides y paratiroides.
Deja que la energía de la sonrisa pase a la glándula timo, sede del amor, del fuego, del Chi y de la energía curativa, siente después cómo se desliza hacia el corazón, sede del amor, de la compasión, del respeto honesto y de la alegría, agradece al corazón su función constante y esencial de bombear sangre.
Lleva la energía de la sonrisa y de la alegría del corazón a los pulmones, agradeciéndoles su función de proporcionar oxígeno al organismo y espulsar dióxido de carbono, sigue sonriendo a los pulmones expulsando la tristeza y la depresión y llenándolos con la gracia de la rectitud.
Sonríele al hígado agradécele su papel en la digestión y en la eliminación de toxinas. Toma conciencia de cualquier enfado y mal humor y llénalo de amabilidad.
Conduce la sonrisa a los riñones, agradéceles que filtren la sangre, eliminen productos residuales y mantengan el equilibrio del agua en el organismo, nota si hay algún temor y hazlo desaparecer, dejando que rurja la bondad; sonríele al bazo y páncreas, agradécele su producción de insulina al bazo dale las gracias por la producción de anticuerpos, siente y nota si hay alguna preocupación disípala y acoge la justicia, conduce la sonrisa al aparato genital dales las gracias por producir hormonas y proporcionarte energía sexual. Vuelve a los ojos, comprueba que no quedan tensiones
Cuando sonrías a cada órgano, piensa que se vuelven esponjosos, húmedos y frescos
15 de octubre de 2007
La Sonrisa Interior
Etiquetas: Chi Kung (Técnicas Curativas)
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